sábado, 31 de marzo de 2012

CERRADO POR DESCANSO DEL PERSONAL

Pues nada amig@s, ya lo sabéis, me tomo unos días de descanso, creo que merecidos, aprovechando la Semana Santa; pero estoy de vuelta antes de lo que pensáis.



Por cierto, para que no me olvidéis, y como no sabéis cuando voy a regresar, os propongo lo siguiente:

1.- Entre todos los comentarios que se hagan a este post, sortearé un regalito, eso si, tiene que haber un número mínimo, y este es........ el que sea, con tal que tenga por lo menos tres cifras (jejeje).

2.- A mi regreso, publicaré una entrada. El primer comentario a esa entrada tendrá premio seguro, siempre y cuando haya dejado comentario el día antes (¿cuando volveré?)...

A ver, no me olvidéis, dejadme comentarios, muchos comentarios, de lo que queráis (yo se que muchos entráis sin ser seguidores directos del blog, animáos a participar en él, es vuestro blog...) y cuantos más comentarios, pues igual me animo y mejoro el/los premio/s.

Bueno, chic@s, que tengáis unos buenos días esta Semana Santa.

Nos vemos antes de lo que os imagináis.

¡Suerte!

Fdo.: La Dirección    ;-)

viernes, 30 de marzo de 2012

Tortilla de bubangos

¡Eh, que no quiero problemas!. Bubangos, sí. Bu_ban_gos. Y no me digáis que los bubangos son más redonditos y pequeños, como los zapayitos...

¿Qué no sabéis de lo que estoy hablando?. ¡No tenéis perdón!. ¿Y si digo calabacines?. ¿Ahora si?, pues no es lo mismo.

Y si no que nos lo digan nuestros amigos de las "Islas Afortunadas".

El bubango es una hortaliza de la familia de las cucurbitáceas (pepino, sandía, calabaza, melón...) cuya producción se centra en la isla de Tenerife (aunque en el resto de las islas Canarias también se da y se consume). De una piel muy clara, pálida, puede tener desde forma redondeada (como el zapayito) hasta alargada como su hermano el calabacín que conocemos todos.


Pues bien, resulta que me acerco al mercado a comprar calabacines que me hacían falta para preparar un pisto manchego y resulta que me encuentro entre todos con dos muy blancos.

- ¿Y esos calabacines?, le pregunto a Dani, mi verdulero.
- Son albinos. Se les habrán colado con el resto.
- ¿Los vendes?.
- Se los va a llevar mi madre, pero si los quieres...
- ¿Qué si los quiero?. Anda muchacho (hubiera dicho con acento canario "muyayo") dámelos que no sabes lo que tienes...

Y así me he hecho con estos dos bubangos para dar cuenta de ellos en una tortilla. ¡Qué delicia!. ¡Qué sabor!. ¡Qué recuerdos!...

Ingredientes (4 personas):

1 bubango (unos 400 gr.)
3 huevos de gallina (preferible de corral)
1 cebolla blanca
Aceite de oliva
Sal común

Preparación:

Pelamos la cebolla, retirando las capas exteriores más secas. Partimos a la mitada en dos cascos y cortamos en brounoise media. Pochamos en una sartén a fuego medio hasta que esté ligeramente dorada.


En ese momento añadimos el bubango cortado en láminas finas (como una patata cuando la vamos a hacer en tortilla), con su piel (ahí está la gracia) y salteamos ligeramente a fuego medio hasta que veamos que se ha ablandado (unos cinco minutos). Retiramos del fuego y reservamos.


En un cuenco batimos tres huevos y añadimos el sofrito de cebolla y bubango. Envolvemos bien.


Ponemos una sartén al fuego y cuando esté bien caliente añadimos una cucharada de aceite de oliva. Vertemos el contenido del cuenco (huevo, cebolla y bubango). Bajamos el fuego al mínimo y dejamos que cuaje.


NOTA: el tiempo dependerá de como os guste la tortilla, si mucho o poco cuajada.

Ayudados de un plato damos la vuelta a la tortilla. Añadimos un poquito de aceite, volvemos a colocar en la sartén y dejamos que se haga por esta cara (vuelvo a insistir en vuestro gusto y en el tiempo).



Retiramos del fuego y servimos en un plato.

Tortilla de bubangos.

Presentación:

Lo normal es presentarla en la mesa en un plato llano y repartir en las porciones que se consideren oportunas, o cortarla en daditos o porciones para que se sirva cada uno.

Tortilla de bubangos.





miércoles, 28 de marzo de 2012

Empanada de trucha con puerros, jamón y piñones

Igual tenía que haber llamado a esta preparación "empanada a la navarra", ¿véis la similitud?.

Ingredientes:

1 trucha
1 masa para empanada de 25 x 32 cms.
50 gr. de jamón ibérico
3 puerros
10 gr. de piñones
Sal común
Aceite de oliva virgen
1 huevo

Preparación:

En una sartén echamos un poco de aceite de oliva virgen y cuando esté caliente echamos los puerros cortados en rodajas, sazonamos y salteamos a fuego medio hasta que queden ligeramente dorados pero aún enteros.


Para la trucha, le habremos dicho a nuestro pescadero que nos quite la espina central, la cabeza y la piel. Luego nosotros quitaremos el resto de pequeñas espinas que tiene, y picaremos la carne en tiras pequeñas. Reservamos.


Por otra parte estiramos la masa de empanada preparada (generalmente viene enrollada sobre papel sulfurado), marcamos la mitad y cortamos.


Colocamos media masa en un plaqué de horno y echamos el sofrito de puerros que hemos preparado anteriormente, dejando sin rellenar como un centímetro en el perímetro de la masa.


Ahora echamos encima del relleno la trucha picada, el jamón cortado en juliana fina y los piñones crudos.


Cortamos un centímetro de los bordes de la otra mitad de masa de empanada y tapamos la base de la empanada en la que hemos colocado nuestro relleno.


“Pellizcamos” los bordes para cerrarla y sellarla, y  adornamos con las tiras que hemos cortado anteriormente y reservado de los bordes de la masa. Pintamos con huevo batido.


Introducimos en el horno precalentado a 180º C durante el tiempo que indique el fabricante de la masa (generalmente a los 20 - 30 minutos suele haber subido y estar dorada). Sacamos del horno y lista para servir.


Presentación:

Se puede llevar a la mesa entera, sin abrir, en un plato e ir repartiendo uno a uno a medida que se corta, o bien, cortar porciones individuales y emplatar. A gusto del consumidor.



Empanada de trucha con puerros, jamón y piñones.

lunes, 26 de marzo de 2012

Madrid CALIDADE con Pepe Solla en Piñera

Tanto monta, monta tanto, Isabel como Fernando. Pues este es el caso de Casa Solla en Madrid, en el restaurante Piñera... Pero al final: Madrid-Galicia CALIDADE...


Del restaurante Piñera, aunque no haga falta hablar, ya hablaremos en otro momento. De Solla... no hay nada que decir... ¿o si?.

Hoy hablaremos de una iniciativa del restaurante de Madrid "Piñera", tal y como es el acercar el resto de cocinas/cocineros de calidad de otros rincones de España a Madrid. Y este ha sido el caso de hoy: poder disfrutar de uno de los grandes del grupo "Nove" para los pobres parroquianos que no tenemos la posibilidad de acercarnos hasta Poio, en Pontevedra, y disfutar de las bondades que nos ofrece Pepe Solla en su cocina.


Personalmente me parece una buena iniciativa, aunque tal y como he quedado con Pepe, esto es no es excusa para que no visite su restaurante. ¡Pepe, prepárate que voy... XA!.

Bueno, a lo que íbamos, el menu de hoy ha consistido en una degustación de lo que hace Pepe Solla en Galicia, con una pequeña reseña de algunos platos que identifican a Javier Aranda en su cocina, la de Piñera. Aunque hoy el protagonista era Pepe...

Hemos comenzado con dos aperitivos: el primero un Royal de guisantes, con un sabor potentísimo, muy rico, y el segundo un lomito de caballa con nabo negro, sin comentarios, un buen producto, de temporada nuevamente, en su justo punto, preparaciones ambas de Javier Aranda.


Luego, continuamos con las entradas del menú degustación especial de Solla, consistente en:

Unas verduras de temporada con base de tomate seco y tierra de boletus (plato de Javier Aranda), todas ellas en su punto, con el toque "crunch" que hace degustarlas en todo su esplendor.


Unos tallarines (yo diría fideos cabellín) de almidón salteado en licuado de alga codium. El mar en la boca. Galicia en Madrid. ¡Superior Pepe!.



Para continuar con una cigala escaldada cocinada a baja temperatura, con un caldo de patas de las cigalas asadas. En su punto. Sin más...



Para rematar con dos pescados:

Un guiño a la Galicia tradicional, con corte moderno, a través de una merluza sobre un puré de tubérculos, brotes y ajada (versión moderna de una merluza a la gallega).


Y después, por estar en temporada, una lamprea con alcachofa y arroz crujiente. Para mí, de los mejores "peces" que se pueden comer en esta temporada. De un sabor y textura que no tiene comparación, aunque, desgraciadamente, vaya por delante la fama que le han puesto algun@s...


A continuación los postres, empezando por una tortilla Alaska (de Javier Aranda). ¡Finísima! y que viene de maravilla como primer postre para rematar la gran comida que hemos tenido.


y una mousse cremosa de chocolate blanco (de Pepe Solla). ¡La guinda que faltaba!, aunque realmente no faltaba nada.


Hemos acompañado la comida con dos vinos gallegos, como no podía ser de otra forma: un Ribeiro, Viña de Martín "Os Pasás", limpio, brillante, untuoso, largo en boca y fresco, que conjuntaba muy bien con todos los platos; y después, un mencía, Ribeira Sacra, Lacima del 2008, muy interesante, y nada que ver con los mencía clásicos. Muy elegante en boca, con una nariz frutal, con recuerdos de crianza, y un paso largo, nada agresivo, muy agradable y largo, largo, largo...


Para rematar el menú degustación terminamos con una buen café solo, unos petit fours y una copa de gin tonic que, como en Piñera, en pocos sitios los preparan igual.




Gracias por la iniciativa. Gracias por la comida. Gracias por el compromiso.

Nos volvemos a ver en Piñera.

Y a ti, Pepe, nos vemos en Poio.